Cádiz a 18 de Junio de 2010
Creo que el sujeto en cuestión es muy peligroso, lo es. Su talante, que es confuso y aderezado constantemente con movimiento de manos y cabeza desacompasados es muy peligroso en el gesto político. Revela un ánimo unidireccional y totalitario. Es cierto, que se puede trazar una armonía musical, incluyendo en ella detalles fuera de compás y que esto puede enriquecer la obra. No obstante, la reiteración en exceso del descompás hasta el extremo de llevarlo a la constante, no es buena política.
“Militancia pura y dura”, solo es una frase, eso sí vertida a la opinión pública por un expresidente. RAE, online: Militancia: 1. Condición de militante. Militante: 1. Que milita. Militar: 1. Servir en la guerra. Esta es la frase en cuestión. ¿Asistimos a un holocausto? ¿Una policía femenina en los centros de trabajo? Patina, la batuta patina con el deseo de este tipo de policía que se presenta como defensora de la igualdad de sexo y que no es más que una brutal medida de represión totalitaria.
¿Militancia?, ¿contra qué? ¿Contra el paro? ¿Contra los mercados? ¿Contra el despilfarro? ¿Contra el enchufismo? ¿Contra el compadreo? Me temo que no, parece referirse a una militancia pura y dura contra la oposición. Este hecho choca frontalmente contra el concepto de democracia, contra la forma política de nuestro Estado. No, una vez electo un grupo político, su misión es liderar y el papel de la oposición cuestionar ese liderazgo, así es nuestro sistema y no al revés.
Este hecho transluce su ideología más profunda, están contra la oposición incluso cuando lideran. El resultado es la detención inmediata del progreso, del crecimiento, del desarrollo y del sentido más amplio de libertad dentro de un marco de Estado de Derecho. Constituye de hecho, la mayor aberración democrática posible y manifiesta en estado puro la esencia impresa en lo más profundo del archicerebelo humano, donde se inscriben los recuerdos de la garrota y la piedra.
Un saludo, J.M. Mora
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