Cádiz a 8 de Julio de 2010
Las grandes revoluciones del conocimiento humano propiciadas por la obra de Nicolás Copérnico, Isaac Newton o Leibniz, pasando por el pensamiento de Voltaire, Jean-Jacques Rousseau, Immanuel Kant o Hegel, “parafimosan” a una humanidad “planetescente” que había perdido la costumbre de hallar en el panorama personalidades de peso, tan revolucionarias del conocimiento y tan esclarecedoras como lo son en nuestro presente las figuras de ZP, Bibiana, Leire, Bono o de la Vega.
Ludwing Fewerbach, Friedrich Engels, Karl Heinrich Marx, Mijaíl Bakunin, Vladímir Llich Lenin, León Trotsky, Iósif Stalin, Nikita Khrushechev, Berzhnev, Mao Tse Tung, Pol Pot, Heng Samrin, Ho Chi Minh, Tito, Ceausescu, Fidel Castro, Kim Il Sung, Kim Jong Il, José Luis Rodríguez Zapatero, Leire Pajín, Bibiana Aido, Bono, De la Vega o Kropotkin son algunos ejemplos de libertadores a los que debemos nuestra prosperidad social he ideológica merced a su maestría intelectual.
La humanidad necesitará varias décadas para alcanzar una madurez suficiente que le permita comprender la profunda revolución ideológica que representa en nuestro tiempo la presencia del magistral quinteto. Sin duda, la obra fruto del pensamiento revolucionario del grupo reformista tendrá una influencia decisiva en innumerables futuras generaciones.
Su genial obra, destacada en su clímax con estandartes de cuidadas elaboraciones como “Plano de estimulación del clítoris” o “El Estado de las Criaturas”, marca una huella indeleble que sobrevuela a los adictos al chiringuito que desbarran sus sobacos sobre la madera, planeando, perfilando y perfeccionando el ritmo crónico de sus gruñidos y de su ideología cobarde y hortera.
Nuestros amados libertadores practican el apartheid, el terrorismo, el asesinato y el hurto como una defensa genética consensuada en las masas alteradas por el caos visual, acústico, moral e idológico que ellos propician mientras les vacían los bolsillos para rellenar los propios. A veces padecen súbitas contracciones diafragmáticas que preceden leves eructos.
Una figura de Lladró de Don Quijote de la Mancha, un plato de Toledo y un par de jarrones de Salamanca, todo ello regalado por Santiago Carrillo, ex secretario general del Partido Comunista de España (PCE), descansa sobre una vitrina en la “Exposición de Amistad Internacional” (dos Bunker gigantescos excavados en las montañas Myohyang, en el distrito de Hyangsan al que llaman oficialmente Exposición de la Amistad Internacional dedicados a Kim Il Sung y a Kim Jong Il).
Un saludo, J.M. Mora
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